18
de agosto de 2016
Hola
Elisa,
Después
de leer y re-leer el libro que me recomendaste me surgen muchas, muchísimas dudas... Parece
como si tuviera por fin en mis manos la clave de por qué soy como soy, pero no
acabo de creérmelo.
Te
enumero todo aquello de lo que habla el libro con lo que me identifico:
-
Hipersensibilidad: captar y entender lo que los demás sienten. Pensaba que esto
lo puede hacer todo el mundo, y me he sorprendido mucho al descubrir que
no es así.
-
Baja autoestima.
- Fui
rechazada por mis compañeras en el colegio reiteradas veces y lo pasaba fatal.
-
Auto-análisis: percepción de mis propios fallos.
-
Necesidad y facilidad de dirigir a los grupos o personas.
-
Incapacidad para centrarme en un objetivo concreto.
- Ataques
de cólera, facilidad extrema para llorar (siempre me han parecido mis peores
defectos).
-
2 psiquiatras, 2 psicólogas. 1 me dijo que tenía baja autoestima, otra que
tengo una gran capacidad para resolver problemas y otra que tengo mi lado
femenino anulado. Pero nada en concreto, dejaba de ir a las
consultas porque no me satisfacía lo que me contaban, me parecía todo muy
frívolo y no me daban un diagnóstico claro de lo que me pasaba.
-
Facilidad para malgastar el dinero, comprar por comprar, me cuesta ahorrar.
-
Fuerte lado masculino, ahora empiezo a ser mas presumida, pero de joven no me
permitía ponerme guapa, para mí era un símbolo de estupidez. Siempre lo
achaqué a criarme con 3 hermanos mayores (todos
varones).
-
Ateísmo, soy incapaz de creer, aunque me declaro agnóstica porque puedo
estar confundida.
-
Montaña rusa: sin duda. Una amiga me dice siempre: hoy estas en la cresta y
mañana estás en el valle. Puedo pasar de la mayor felicidad a la más absoluta
de las amarguras sólo con una palabra de otra persona.
-
Dar la imagen de imbécil. Esto me ha pasado muchas veces, porque planteo mal
las preguntas o digo cosas incoherentes u obvias.
-
Alto sentido de la justicia y la legalidad. Me cuesta no ser fiel a mis principios
y una persona no integra.
-
Necesidad de ser aceptada y sentirme querida, cuando no me siento querida sufro
mucho.
-
Impaciencia: cuando la gente me habla, muchas veces acabo yo la frase; si
es una pregunta, contesto antes de que hayan acabado de formular la pregunta.
-
Ligera sensación de desfasada o loca. (A veces, no siempre).
-
Como madre siempre me he sentido "mala madre" con el comportamiento
de mi hijo, siempre me digo: algo he hecho mal. (Aunque empiezo a
cambiar el discurso).
-
Y por supuesto , no me creo muy inteligente. Bueno, es que en esto es muy raro,
porque a veces si me veo lista ante mis propios logros o reflexiones, pero
otras veces no, para nada. Y si me comparo con mi marido, por ejemplo, el me
parece mucho más inteligente que yo.
Los
cuestionarios de personalidad me dicen que soy pragmática y activa, cosa que
creo es correcta.
Y
por supuesto, hay cosas que aparecen en el libro con las que no me identifico.
¿Podría ser entonces que nuestro hijo haya heredado de mi esa hipersensibilidad
y la inteligencia de su padre? Cuando acabé de leer el libro me sentí
muy feliz, pero a medida que pasan los días no lo veo tan claro, no puede
ser que yo sea así, aunque claro, quizás te rías cuando leas esto....
Elisa,
estoy hecha un mar de dudas y me encantaría poder despejar incógnitas, por mis
hijos, porque si yo soy capaz de entenderme a mi misma estoy segura que podré
ayudarles a ellos.
Con
todo esto que te he contado ¿es posible llegar a alguna conclusión clara?,
Mañana
nos vemos, así que si te estoy volviendo loca, me lo dices en directo.
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